Abraza
Desde nuestro carisma josefino, con su forma de entender el mundo y la educación, escogemos para este nuevo curso la imagen del abrazo.
Hoy, en nuestras Comunidades Educativas el ABRAZO es…
- Encuentro, diálogo, acogida al que llega…
- Aceptación incondicional de la persona, aunque sea diferente a mí…
- Cercanía con los que están solos…
- Acompañamiento y apoyo en momentos difíciles y de duda…
- Celebración en los triunfos y alegrías…
- Apertura al mundo y cuidado de nuestro entorno…
El abrazo de Jesús aparece muchas veces en el Evangelio (al samaritano, el del padre al hijo pródigo, el de Jesús a Pedro, a las mujeres criticadas y condenadas…). Es un Jesús que acoge a todas las personas, sin ningún tipo de distinción. Jesús fue un contemporáneo, pues hace más de 2000 años se dirigía a todos, especialmente a los que eran “diferentes” o poco aceptados en la sociedad de su momento. ¿Y hoy, quiénes son los “leprosos”, los tirados en la cuneta que miramos o grabamos con el móvil por morbo, sin prestarle ayuda? ¿Quiénes son los “raros” en tu clase? ¿Cómo los tratas? ¿Indiferente? ¿los criticas? ¿Pasas de ellos porque son diferentes a ti?
Seguramente, al llegar a tu nueva clase, has empezado a “analizar” a tus compañeros, y has hecho, de forma inconsciente, un juicio: con este me junto, esta me cae mal, me gusta/no me gusta mi clase…
¿Por qué no nos dejamos de prejucios y miramos con otros ojos? ¿Por qué no damos una oportunidad a la idea de crear un buen ambiente en el colegio, donde todos tengamos cabida? ¿Por qué no respetar cómo es cada uno?
La sociedad del siglo XXI es muy plural, y todos luchan por tener su espacio y sus derechos sociales. ¿Quiénes somos nosotros para hacer lo contrario? Vosotros, alumnos, sois el futuro de esta sociedad, y debéis tener muy claro que ante todo hay que tener RESPETO Y EDUCACIÓN en valores. Unos valores que tienen sus raíces en el mensaje de Jesús, porque todo lo que Él enseñó no pasa de moda. Por eso, el lema “abraza” es ideal para tener presente todo esto. Abrazar es acoger, respetar, querer lo mejor para todos…
Fijaos que el lema podría haber sido “abrazados” o “abrazando”… pero, no. Es “abraza”, para que des un paso adelante y abras los brazos. Para que con tu libertad decidas acoger, escuchar, comprender…
Cuando se marca un gol en un partido, ¿Qué hacen los jugadores? correr para juntarse y abrazarse. Cuando le pasa algo bueno a alguien que aprecias, ¿Qué haces? abrazarlo. Cuando un amigo está pasando por un mal momento y llora ¿Qué haces? das el paso y lo abrazas. Os abrazáis. Un abrazo no se le da a cualquiera, ¿Verdad? Se le da a aquellas personas a las que le tienes confianza o cariño. Fijaos, Jesús hace lo mismo con Pedro (ejemplo que hemos citado al principio). Jesús pregunta a sus amigos, ¿Y vosotros quién decís que soy yo? Y Pedro le dice la respuesta correcta: el Hijo de Dios. Jesús, le da “las llaves” de la Iglesia, como gesto de confianza total. Le dice que va a ser su representante. Con esas llaves puede abrir y cerrar “la casa de Dios”. ¿Vosotros le dais las llaves de la casa a cualquiera? Imagino que no, porque si se la das al primero que pilles, te puede “entrar hasta la cocina”. Dar las llaves es entregarle a esa persona toda tu privacidad, y confiar en ella. Le dejas que abra tu casa cuando tú no estés para regarte las macetas, para mirar si te has dejado encendido algo mientras tú no estás… Fijaos cómo Jesús confía en Pedro. El gesto del abrazo es extender los brazos, salir al encuentro de la persona, dejar que se acerque a ti para que establezcáis contacto físico. Es confiar en ella. ¿A que cuando se da un abrazo, sentís cómo la persona os transmite una energía?
Jesús hace lo mismo con nosotros, nos abraza. Nos da cantidad de situaciones para acercarnos a Él y abrazarlo. Lo que pasa es que está en nosotros hacerlo o no. Hay quien abraza el postureo, la chulería, y la falta de respeto y educación. En nosotros está abrazar lo bueno, lo que da paz, lo que no provoca conflicto. En nosotros está abrazar la convicción de que se puede ser mejor persona, de que podemos ser una clase alegre, sin conflictos, donde haya buen rollo.
Y tú… ¿A quién abrazas, o qué quieres abrazar?
¡Abraza!
Programación Pastoral
Grupos de pastoral
A Contracorriente
Abrimos puertas del Centro para que nuestros jóvenes tengan espacios de encuentro con Dios
La Pastoral es el puntal y motor que nos mueve. Fieles a nuestra inquietud, procuramos ofrecer espacios de encuentro con Dios y con los demás, para que los jóvenes cultiven su dimensión espiritual.
Conformes al Ideario católico del Centro, celebramos los tiempos litúrgicos preparando Eucaristías y celebraciones, donde se participa de manera activa y viva, para que puedan encontrar a Dios en el mundo.
También pueden unirse a diferentes movimientos. Sigue leyendo abajo!!
¿QUÉ PASA POR AHÍ?
El MSJ es un lugar de encuentro y de convivencia, donde se comparten experiencias, y se inculcan valores cristianos. Por medio de convivencias y campamentos de verano, conviven con otros jóvenes de diferentes colegios de la Congregación.
No te lo pienses más y acércate!
JUVEN es un movimiento para aquellos que desean recibir formación para ser catequistas del MSJ. Con ello los antiguos alumnos más jóvenes, permanecen arraigados a los valores que se les ha inculcado.
El GRUPO DE ORACIÓN SAN JOSÉ se reúne una vez al mes para, simplemente, orar. Lo componen jóvenes universitarios que hacen un hueco para cargar las pilas.
Si eres de esos que desean hacer un parón, este es el lugar adecuado para hacerlo.